domingo, 13 de noviembre de 2011
Avistando a Big Foot en la MALLÁ DEL LLOP
Hacia mucho tiempo que no salíamos de ruta. Las lesiones nos habían dejado en el dique seco, pero ya estamos como nuevas y dispuestas para afrontar todo reto-ruta que se nos cruce en el camino. Y así fue.
Con las patitas recién reparadas, enfundadas en unas nuevas LAFUMA ,y deseosas de brincar entre rocas por los parajes de la comarca, nos dispusimos, bien temprano, a emprender la aventura.
Esta vez , engañaríamos vilmente a dos cabritas jóvenes, María y Ana. Quedamos en el habitual punto de partida,para compartir el camino hasta el inicio de la ruta, que esta vez ,sería en el pantano de Guadalest.
Como los turistas, llevaba todas las manos ocupadas, con mapas a mano ,,indicaciones y demás apuntes para esta nueva ruta.
Llegamos a Guadalest y nos dirigimos por la carretera hacia callosa, hasta que vimos la entrada que da acceso al pantano. Seguimos por una estrecha carretera pasando por el lado del pantano, hasta que está se terminó y comenzaba el camino de tierra.Dejamos el coche en un rinconcito y comenzamos a caminar. Atentas al inicio de la ruta, indicada por una pequeña entrada con una bella estructura de piedras, más conocida como mojón, de los cuales veríamos muchos en el camino, algunos de piedras y otros de cabras, y animales diversos .
Seguimos el camino marcado, luchando contra las cientos de zarzas que deseaban dejar su recuerdo en nuestra piel y lo consiguieron , aunque más de una también recibió lo suyo y lo de su prima. Pasamos por un barranco, que desafiaba al infinito, y al que dejamos a la derecha para seguir ascendiendo. Por aquí, ya se escuchaba algún bufido de las novatas, y que aproveche para hacer sonar el divertido sonido de mi cámara de fotos. Unas magnificas vistas de todo el pantano ,limitado por el horizonte, que te pedía el dni para poder adentrar tu mirada más allá de él.
Escalamos un poquito, avistando el paso anterior de nuestras colegas las cabras, de esas que llevan cuernos y no son imaginarios. Seguimos por el camino ,repleto de mojones y tristeza, pintada en los arboles escuálidos y ennegrecidos por el paso del fuego por esas lindes.
El camino aunque hiriente por las caricias perversas de las zarzas, se vistió de carcajadas con las chispeantes conversaciones de la cabras, o los gritos histrionicos ante el ataque de las afiladas enemigas, con la base musical de respiraciones entrecortadas y pensamientos silenciosos de " quien me mandará a mi ..un domingo...".
Pero mientras mis compañeras de camino, maldecían a las plantas carnívoras o intentaban calmar su respiración desbordada por la subida, yo intentaba coaccionar a las nubes negras que venían hacia nosotras desde la cumbre, de que se dieran una vuelta por otros lares. Pero supongo que las legañas limitaban el poder de mi mirada láser.
Llegamos a un bebedero de animales, a los pies de una formación rocosa donde se podía escuchar el zen sonido del agua, en cascada, de algún rio perdido bajo esa frondosa flora. Paramos unos segundos,para ajustar respiraciones, zapatillas y cortar algún dedo que rozaba con LAFUMA. En este punto, más fotos :)
Y comienza la odisea, algunas marcas contra la mentalidad básica de una cabra. Para que dar giros ,vueltas y rotondas si la linea recta es mas corta?. Y allí que vamos, cegada por el deseo de encumbrar y de arremeter mis puños contra la nube negra que pasaba de mi acoso, olvidé que había ido acompañada. La rabia movía mis piernas tan veloz que tan solo mis bellas orejas ,escuchó los gritos de las cabritas ..." cuando llegues ,escribe¡¡¡¡" . El agotamiento y el principio de molestias comenzaba a fluir por los labios de mis compañeras, mientras yo seguía con la vista puesta en la puñetera nube que nos rodeaba. Ade, en este momento crucial ,miraba atenta cualquer movimiento de ataque de unas cabras cabronas que estaban a tomar por saco. Pero lo suyo con las cabras es mítico ....
Llegando al final de la subida escalonada, decidimos el cambio de rumbo ... la nube se cerraba sobre nosotras, las lesiones antiguas hacían mella en las cabras y a ade ya no le quedaban dedos que cortar por el roce de sus zapatillas, por lo tanto y ante las palabras oscas de la general cabrona...descendimos lo ascendido hasta llegar al punto de inicio, no sen antes ser sinceras con las mayas sugerente de María.
Llegamos al coche, mientras acabe con la vida de la manzana de María, Ana devoró un sandwich, en el tiempo que María hacia lo propio con unos cuantos y Ade se convertía en bigfoot.
Unas risas ,mas fotos y la sorprendente aparición de cuatro jinetes del apocalipsis sobre sus bmw, que perdidos requerían de nuestra sabiduría. Con la mirada de soslayo, un ojo en sus movimientos y otro buscando una piedra elegante y hermosa que pudiera actuar de revulsivo para su huida, les indicamos el camino desconocido incluso para nosotras.
Aunque teniendo a big foot ,quien quiere piedras???
Una mañana estupenda ,a pesar del tiempo menos armónico con nuestra alegría. Y pendiente de vuelta para colmar las expectativas con unas fotos en la cima... :)
Insthar
Mas fotos :)
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